Reconstrucción de una memoria colectiva sobre los movimientos armados en México

 

* Articular diversos fragmentos históricos sobre la guerrilla: reto para las ciencias sociales

 

México, D.F., 8 de septiembre de 2015.– La madrugada del 23 de septiembre de 1965 un grupo de 13 personas, integrantes del Grupo Popular Guerrillero, intentaron tomar por asalto el cuartel del Ejército Mexicano en ciudad Madera, Chihuahua. El saldo de esta acción fue la muerte de 8 guerrilleros, 6 soldados y 10 heridos.

En torno a la conmemoración del 50 aniversario de este acontecimiento, que marcó un momento clave en la historia de los movimientos políticos del país, se llevó a cabo en el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM el coloquio “A 50 años del asalto al cuartel madera. Movimientos armados y contrainsurgencia: presente historia y memoria”, coordinado por Eugenia Allier, investigadora del IIS-UNAM.

Contexto y narrativas oficiales

Es imposible entender el asalto al Cuartel Madera sin ubicarlo en un contexto internacional específico. Durante la guerra fría, que enfrentó a las dos naciones hegemónicas de la época, el gobierno mexicano tomaría partido por Estados Unidos y por ende participaría en la lógica anticomunista. “Madera fue un escenario pequeño de la guerra fría” donde el régimen autoritario aniquiló a sus oponentes, afirmó el doctor Lorenzo Meyer, profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.

Tras el asalto al cuartel madera, la prensa de la época no tardó en calificar a los protagonistas del suceso como gavilleros, bandidos o asaltantes, con el fin de generar en la opinión pública una connotación negativa de estos movimientos y borrar la existencia de grupos guerrilleros en México. Esta estrategia mediática continuó durante toda la década del 60 para minimizar el surgimiento de grupos armados en diversas zonas del país, coincidieron durante sus intervenciones Edna Ovalle, Sergio Sánchez, Eugenia Allier y César Vilchis.

Caminos de la revolución.

A partir del asalto en Madera, las diversas organizaciones de izquierda de la época debatieron dentro de sus filas las alternativas de lucha. La primera disyuntiva fue la pertinencia de la vía armada frente a la opción democrática, señaló Lourdes Rodríguez, quien participó en los movimientos políticos de aquel momento.

Otra disyuntiva se generó años después del asalto en Madera. A partir de la conformación de la Liga Comunista 23 de Septiembre, se generaron dos posiciones teóricas acerca de los grupos que serían los protagonistas de la revolución; el campesinado o el proletariado, grupo por el que finalmente se inclinaría la dirigencia de dicha organización, apuntaron Alicia de los Ríos y Alejandro Peñaloza.

Desaparición forzada en México.

Otro de los temas, abordados por los investigadores durante el coloquio, fue el referente a la desaparición forzada en México. Una práctica sistemática operada por el Estado Mexicano que proliferó a raíz del surgimiento de diversos movimientos guerrilleros durante los años 70 y principios de los 80.

Al respecto Pilar Calveiro señaló que la Guerra sucia fue una estrategia represiva que trató a la disidencia bajo una hipótesis de guerra, una forma de aniquilar fuera de las leyes a los adversarios sin enfrentar ninguna consecuencia política. Y enfatizó que esta práctica, la cual nunca dejó de operar en el país, en los últimos años se ha incrementado y ha diversificado a sus víctimas, siempre con la complicidad del Estado.

Construcción de la otra memoria.

El principal punto de confluencia de todos las intervenciones, fue la construcción de una memoria alterna a la visión oficial sobre los movimientos armados en México. Al respecto Enrique Condés señaló la urgencia de construir una historia general y rigurosa sobre este fenómeno, ya que actualmente se encuentran dispersas diversos trabajos sobre aspectos específicos.

El coloquio, que se llevó a cabo los días 7 y 8 de septiembre de 2015, reunió a una veintena de investigadores de diversas instituciones y fue coorganizado por Gabriela Rodríguez, Camilo Vicente, César Vilchis y Larissa Riberti.

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